Este lunes, tras más de una hora de debate, los representantes de los distritos ante el Consejo de Legislación de 2010 decidieron que los ciberclubes, o Rotary E-Clubs, formen parte de Rotary International con carácter permanente.

Esta medida, aprobada por 430 votos a favor y 85 en contra, fue recibida con una espectacular ovación.

“De esta manera, los rotarios con discapacidades físicas o problemas de horario podrán reunirse periódicamente y realizar proyectos de servicio a través de Internet”, afirmó el director de RI Antonio Hallage al exponer la propuesta ante el Consejo. Los representantes de los 531 distritos rotarios se reúnen esta semana en el centro de Chicago para considerar más de 200 proyectos de legislación, algunos de los cuales proponen modificar los documentos estatutarios de RI.

Propuesta por siete ciberclubes rotarios y la Directiva de RI, esta enmienda otorga permanencia al proyecto piloto de ciberclubes, el cual, tras seis años en funcionamiento, concluirá el 30 de junio.

La enmienda 10-06 define a los ciberclubes como clubes rotarios, denominados Rotary E-Clubs, que se reúnen a través de comunicaciones electrónicas. Una enmienda separada, aprobada por 311 votos a favor y 197 en contra, permite el funcionamiento de dos ciberclubes por distrito. Los socios de estos clubes tendrán las mismas responsabilidades que los demás rotarios en cuanto a desarrollar proyectos de servicio y promover La Fundación Rotaria.

Algunos de los ciberclubes piloto se reúnen solamente mediante foros en línea, mientras que otros combinan las sesiones electrónicas y presenciales. La decisión al respecto depende de cada ciberclub.

Observando que la edad promedio de los socios de los ciberclubes es de 47 años, los partidarios de la enmienda destacaron que constituyen un medio eficaz para captar rotarios más jóvenes. “Para que nuestra organización crezca mundialmente, tenemos que buscar nuevas maneras de invitar a la gente joven”, indicó Lucinda General, representante del Distrito 5510 (Arizona, EE.UU.).

Los 14 ciberclubes existentes cuentan con 360 socios en 30 países y regiones, y desarrollan 586 proyectos de servicio. Las reuniones se efectúan en chino, inglés, finlandés, griego, portugués y español. En conjunto, han aportado casi 150.000 dólares a la Fundación.

Douglas W. Vincent, del Distrito 7080 (Ontario, Canadá), insiste en que los ciberclubes significaban una oportunidad demasiado valiosa como para dejarla pasar. “No lo quitan nada a Rotary y es mucho lo que le aportan”.